Se verificó ayer a las cinco de la tarde en el Museo Nacional, la
exposición de pintura de la artista nacional Señora Doña. Flora Lujan de
Amighetti, patrocinada por el Departamento de Extensión Cultural de la
Universidad de Costa Rica y el Ministerio de Educación Pública.
Desde todos los ángulos constituyó ese evento un rotundo éxito. Una muy
eficiente organización que permitió que éste se desarrollara con toda
precisión, sin carreras, sin improvisaciones, tan comunes
desdichadamente en nuestros actos de cualquier naturaleza, por lo raros
que somos los ticos a dejar todo para última hora y a improvisar. Una
numerosa asistencia de artistas, intelectuales, aficionados y amigos de
la expositor», que se dieron en el museo para admirar las bellas obras
allí expuestas y congratular a ésta. Y por último y más importante, la
exposición de un magnifico grupo de pinturas, que mereció los mas
cálidos elogios de quienes tuvimos el privilegio de admirarlos.
Estuvieron presentes, entre el numerosísimo público, esa mujer admirable
por su dinamismo, por su gran corazón, por su cultura y simpatía, que se
llama Doña Doris de Stone; el señor Ministro de Educación Pública y
otras altas personalidades. A la hora prefijada, hizo la presentación dt.
la artista, otro artista ampliamente conocido dentro de nuestros
círculos de las Bellas Artes, el escultor don Juan Manuel Sánchez
Barrantes, quien con palabra sencilla, cálida y espontánea, hizo
relación de la trayectoria artística de la señora Lujan, y un merecido y
sincero elogio a su exitosa labor en el campo de la pintura.
Tuvo asimismo palabras elogiosas, para todos los costarricenses, que
cada vez en mayor número y con más acierto, van interesándose en las
artes. con el resultado sumamente ha lagadcr de ir formando para Costa
Rica un rico acervo artístico.
Doña Flora, con esa naturalidad, modestia y gran simpatía que son sus
características y que prodiga como un presente precioso a todos cuantos
están a su alrededor, atendió en forma cálida y cordial a los
visitantes.
El conjunto de cuadros presentados unos a la acuarela y otros al oleo
fue realmente bueno destacándose algunos, como obras de un gran valor.
Tiene la pintura de la señora Lujan una característica que le ha sido
trasmitida de la artista: la naturalidad. No hay pose, no hay
afectación; no hay en los cuadros el más mínimo vestigio de que su
creadora halla buscado determinados efectos, que forzan al observador y
lo llevan aún contra la propia voluntad a fijar su atención en una cosa
determinada. Hay naturalidad completa en sus obras, las cuales reflejan
la serenidad, la exquisita sensibilidad y el equilibrio de su autora. No
hay violentas, ni agresividad, no motivo o efectos atormentadores que
dejen en el espectador un saldo de angustia. |
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Aún cuando en algunos de sus cuadros muestra audacia en el colorido y
tonalidades fuertes y de gran contraste, esto se atenúa por la armonía
que logra imprimirle a la forma y por una correcta perspectiva que l da
sensación de profundidad. Tiene gran dominio de la forma en las cabezas
humanas, y logra su mejor realización en las expresiones de los rostros.
En éstos, sea el colorido que emplea cualquiera, y los tonos fuertes o
débiles, se trasluce nítidamente la personalidad y el espíritu del
modelo. Abarca gran número de motivos el grupo de pinturas expuesto; encontramos retratos, desnudos, paisajes marinos, de montañas, de aldeas
etcetera. La armonía y el equilibrio son las características comunes,
que le imprimen a todos ellos el sello de las cosas amables suaves y
serenas.
LA PRENSA LIBRE felicita coordialmente a la señora Luján de Amighetti,
al artista a la artista exquisita que ayer se consagró en nuestros
medios artísticos con su magnífico conjunto de obras, y que le augura y
desea los mal resonantes triunfos en el porvenir. |
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