San José, 2
de julio del 2009
COMUNICADO DE PRENSA
Poesía que se transparenta en la plástica
Ciudades Contenidas y La Luz de la Memoria
son los dos evocadores títulos para una sola
exposición que reúne la obra reciente del
artista Rolando Garita. La muestra, que se
compone en su total de 87 producciones; 17
obras matéricas y 70 acrílicos, será
inaugurada el próximo jueves 9 de julio en
el Museo Calderón Guardia.
Pero Garita, destacado artista nacional, que
en su larga carrera ha expuesto unas 20
veces de forma individual y el doble
colectivamente, también ha incursionado en
la poesía, de tal forma que no es gratuito
que el abordaje plástico de estas obras
reflejen las búsquedas e inquietudes que
también plasma con la palabra.
“Al aproximarnos a su obras desde un primer
momento se transparenta su delicada
sensibilidad de poeta, que le permite, a
través de la letra y el color, coleccionar
recuerdos hilvanados a modo de obras de
arte”, expresó Luis Núñez, curador de la
exposición y director del Museo.
En Ciudades Contenidas Garita nos presenta
el resultado de sus inquietudes sobre la
visión de la ciudad y su aspecto de
contención. “Ciudades contenidas,
compactadas, intactas, de muros y piedras
gastadas por el paso del hombre. ¿Cuántas
cosas han sucedido a lo largo de su historia
en esos espacios delimitados? ¿Cuánta
protección sentirán sus habitantes dentro de
sus muros? Me cautiva esa sensación de
abrigo que brinda la ciudad, esa necesidad
humana de miles de años por compartir en
sociedad y sentirse protegidos”, reflexiona
el artista sobre el tema.
Para esta exposición sus obras matéricas
iniciaron con piezas casi monocromas, luego,
poco a poco fue añadiendo más colorido.
Están compuestas cada una por 36 tuquitos de
madera, moldeados e intervenidos con
infinita paciencia, de modo que cada pedazo
bien podría corresponder a una obra de arte
en sí mismo. Luego, casi como jugando al
rompecabezas, se dedica a la composición,
aplicando criterios formales estéticos y su
propia sensibilidad de artista.
“Desde hace treinta años trabajo el arte
matérico a partir del objeto encontrado y
fabricado; perforando, manipulando, tratando
de dejar esa huella de la que hablo
permanentemente en mi obra. De forma
paralela he trabajado diferentes cosas con
una misma idea”, señaló.
“A veces juego con lo casual que también
aporta, busco el balance, la unidad, la
armonía y también cuando es necesario romper
con ella; depende del conjunto de emociones
y vivencias, de las alegrías o tristezas de
algo vivido.”
Según Núñez, estas obras “manejan un
lenguaje que nos recuerda a la escuela del
sur y a Torres García.”
Por otro lado, La Luz de la Memoria “es una
visión de más de setenta acrílicos, todos de
igual tamaño para acentuar el sentido de
serialidad de la colección, todos a modo de
planos, esquemas o croquis, pero, en este
caso, del recuerdo robado de momentos
vividos. En su conjunto estas obras resultan
una suerte de archivo plástico que acumula y
presenta pequeños chispazos de la memoria.
Esta colección, de un gran sentido lírico,
delicado y sutil, es una muestra donde el
reposo y la introspección se unen con la
belleza de lo espiritual, todo esto posible
gracias a la desarmante candidez que Rolando
Garita aporta a estas piezas”, opinó Núñez.
Para el artista ésta es una sola propuesta
con dos temas que se hermanan y conforman
una unidad: “Van en la misma dirección de
contemporaneidad y búsqueda. Son variaciones
de una visión etérea, aérea, de la misma
inquietud que tengo desde la infancia por lo
rápido del instante y a la vez por la huella
que deja el hombre en su fugaz paso. Nada
permanece intacto, en la quietud todo se
transforma. Es un poco lo que escribo y un
poco lo que vivo. No voy de tema en tema,
son las mismas sensaciones”, expresó Garita
sobre sus motivaciones creativas.
Su paleta oscila de los colores fríos a los
cálidos, lo cual Garita aduce que sucede
porque él mismo se reparte entre Las Nubes
de Coronado, donde tiene su taller y la
bajura guanacasteca, donde reside su
familia. “En mis obras están los colores
presentes en mi vida cotidiana: nubes,
lluvia, neblina, azules; los colores fríos
de la altura así como los colores cálidos de
las tierras bajas”, apuntó.
Aunque el arte abstracto no le es ajeno en
sus treinta años de carrera, ésta es su
primera exposición en la que presenta su
trabajo completamente en ese estilo. “He
hecho esporádicamente obra abstracta, pero
no le había dado un desarrollo tal como para
exponer 87 obras, la figura pudo más, pero a
estas alturas de mi vida no debo quedarme en
una cosa. Es un gran reto, tanto o más
difícil que la figuración porque requiere
mayor esfuerzo y creatividad, muchas horas,
días y meses de búsqueda para finalmente
poder aspirar a comunicar algo”, manifestó
Garita.
Luego agrega: “Parece contradictorio tratar
de decir algo con la abstracción. Yo
quisiera que el arte pudiera llegar a todos
porque la sensibilidad no depende de la
clase social o de los estudios
universitarios, si se goza de sensibilidad
se podrá disfrutarlo. El artista no crea una
obra pensando en el observador, sino para
satisfacerse uno mismo. No me compromete
hacer algo de fácil lectura para que guste,
pero en la medida de que mi obra guste me
voy a sentir muy contento.”
Para finalizar Núñez acotó: “Más que de
pintura o arte matérico, hablaría del
sentido poético plástico de esta hermosísima
selección.”
La exposición será inaugurada este jueves 9
de julio a las 7 p.m. y se mantendrá en
exhibición por el resto del mes. Se podrá
visitar de forma gratuita de 9 a.m. a 5 p.m.
de lunes a sábado. El Museo Calderón Guardia
está ubicado en Barrio Escalante, de la
Iglesia Santa Teresita 100 metros este y 100
norte (Avenida 11, calle 25).
Lissette López V.
Relaciones Públicas
Museo Dr. Calderón Guardia |